Estamos recibiendo la entrada del Año Nuevo 5783 en el Calendario Cabalístico y la forma tradicional de hacerlo es compartiendo una festividad llamada Rosh HaShaná, que este año inicia al salir la primera estrella de este domingo 25 de septiembre y concluye hasta el martes al ponerse el sol. Rosh Hashaná significa literalmente “Cabeza del Año” y simboliza a nivel interno, el comienzo del camino espiritual en la vida de la persona. Es una oportunidad de renovación total.
A diferencia de los modelos del tiempo basados en secuencias lineales; el Calendario Cabalístico se puede comprender mejor como una dinámica en espiral. Cada momento del año está imbuido de la energía cósmica que le dio origen; es una ventana de oportunidad metafísica en el tiempo propicia para desarrollar una actividad espiritual en específico que en otro tiempo, no.
Lo que celebramos y revivimos cada Rosh HaShaná es la creación del libre albedrío, que aconteció el sexto día de la Creación al manifestarse la presencia del hombre en este plano. En hebreo la palabra hombre es Adam, y viene de la raíz de la palabra asemejar, o sea que en su nuevo nacimiento el hombre tiene un deseo de asemejarse a algo superior, al Creador.
Por definición el libre albedrío sólo existe en el momento presente. Todo lo que alguna vez hemos hecho, tanto positivo como negativo, afectó a nuestras almas. Sin embargo, la esencia de Rosh HaShaná, es volver al punto de tábula raza, el punto cero. Como un alma totalmente nueva, completamente en blanco.
Este día el Creador nos brinda la oportunidad de elegir los valores y parámetros que nos gustaría que se manifiesten en nuestra vida para el nuevo año. Entonces, el Creador nos otorga la clase de año que nosotros mismos elegimos de acuerdo con lo que estamos dispuestos y queremos hacer; no tanto por lo que hemos hecho en el pasado. Esto nos dice que el juicio de Rosh HaShaná no es sobre el estado de nuestras almas sino más bien sobre nuestras elecciones de libre albedrío.
Como puedes darte cuenta la oportunidad de ese día es enorme. Nuestras plegarias en Rosh HaShaná son que todo el mundo llegue a una valoración profunda de la existencia del Creador.
Durante los festejos de Rosh HaShaná se ingieren alimentos a base de manzana con miel para simbolizar el anhelo de un año dulce, y otros alimentos especiales que simbolizan las bendiciones del nuevo año. El simbolismo de los alimentos durante la cena de Ros HaShaná nos recuerda que todo lo que procede del Creador es bueno. Pero hay dos formas de recepción de “lo bueno”: a veces las cosas nos muestran un lado dulce y otras veces: un lado amargo.
El Talmud nos enseña que cuando juzgamos los eventos como negativos, inmediatamente debemos decir “Gam zu letová”, “También esto es para bien”; ya que lo verdaderamente bueno no es fácil de ver. Generalmente el bien mayor se encuentra oculto, particularmente para quienes viven con más apego en la dualidad. Por lo tanto, es altamente espiritual inyectar certeza en todo momento, aún si no podemos ver inmediatamente lo bueno que hay escondido detrás de las apariencias.
Que tengas un Año Bueno y Dulce!!
Shaná Tová!!
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